viernes, 29 de noviembre de 2013

Cóctel vegetal contra el cáncer de mama

Un equipo científico de EE.UU., asegura que un cóctel de nutrientes químicos activos que se encuentran en alimentos como el brócoli, las uvas, las manzanas, el tofu y la raíz de la cúrcuma es capaz de suprimir el crecimiento de las células de cáncer de mama y conducir a la muerte de las mismas sin producir ningún daño a las células sanas.
 
El estudio del LSU Health Sciences Center de Nueva Orleans y el Centro de Cáncer de Scott S. Stanley, dirigido por el Dr. Madhwa Raj, probó diez nutrientes químicos protectores conocidos que se encuentran en alimentos como el brócoli, las uvas, las manzanas, el tofu, y la raíz de la cúrcuma, antes de definir el combo de los seis nutrientes vegetales (la curcumina conocida como la cúrcuma, isoflavona de la soja, Indo-3–carbinol de las plantas crucíferas, C-ficocianina de la espirulina, reservatrol a partir de uvas, y quercetina, un flavonoide presente en las frutas, verduras y té).
 
Los investigadores evaluaron los compuestos anteriores y encontraron que individualmente eran ineficaces, sin embargo, al hacer un súper cóctel se suprimía el crecimiento de las células de cáncer de mama en más del 80%, además, se detenía el ciclo celular y se logró desencadenar el proceso que conducía a la muerte celular que resultó en la aniquilación de 100% de las células de cáncer de mama en la muestra. No se observaron efectos nocivos en las células control de acuerdo a los resultados publicados en la edición de noviembre 2013 de la revista Journal of Cancer.
 
“Una de las principales causas de la recurrencia de cáncer de mama y la mortalidad es un pequeño grupo de células madre del cáncer que evaden la terapia”, señala el Dr. Madhwa Raj. “Estas células a menudo resisten los fármacos y tienen la capacidad de generar nuevos tumores, por lo que es de vital importancia desarrollar nuevos enfoques para el tratamiento o la prevención más eficaz y segura de cáncer de mama”, añadió.
 

miércoles, 27 de noviembre de 2013

El intestino, un actor clave en la respuesta a la quimioterapia

Nuestro sistema gastrointestinal es un actor clave en el sistema inmune, con decenas de miles de células defensivas 'alojadas' entre sus pliegues y listas para actuar en cualquier rincón del organismo.
 
Esta semana, dos artículos publicados en la revista "Science" demuestran que la flora bacteriana que habita en nuestro aparato digestivo puede ser clave en la respuesta a los tratamientos oncológicos.
 
En el primero de los trabajos, liderado por Noriho Iida, del Instituto Nacional del Cáncer de EEUU, se estudió a ratones cuya flora bacteriana había sido "eliminada" (bien con un tratamiento a base de antibióticos o bien porque habían sido criados en un ambiente libre de gérmenes, en cuyo el cual su sistema inmune fue incapaz de desarrollarse). Cuando se les implantaron diferentes tipos de tumores de manera subcutánea, los investigadores observaron que la respuesta a la quimioterapa era menor que la de otros roedores cuya microbiota había permanecido intacta.
 
Aunque en este trabajo se observó tanto la respuesta en animales tratados con inmunoterapia y con quimioterapia, en el segundo de los trabajos se eligió únicamente un quimioterápico clásico, muy habitual (la ciclofosfamida), para llegar a las mismas conclusiones. De nuevo en modelos con animales, Sophie Vigaud y sus colegas del Instituto Nacional de la Salud francés, demostraron que este medicamento altera la composición de la microbiota del intestino delgado y observaron que con la ciclofosfamida, muchas bacterias gástricas son capaces de atravesar las paredes del intestino y al invadir el torrente sanguíneo y los ganglios linfáticos estimulan una reacción del sistema inmune que ayuda a combatir el tumor.
 
Sin embargo, en el caso de los ratones que carecían totalmente de gérmenes (porque habían sido tratados previamente con antibióticos para 'aniquilar' su flora bacteriana), sus tumores parecían resistentes al tratamiento con ciclofosfamida. En cambio, si se les restauraba la flora intestinal, se recuperaba la eficacia antitumoral del medicamento.
 
La cuestión no es baladí si se tiene en cuenta que muchos pacientes con cáncer reciben antibióticos para tratar infecciones que pueden sufrir durante su enfermedad, aunque varios especialistas estadounidenses consultados para un comentario en la misma revista también coinciden en que es demasiado pronto para extraer conclusiones en humanos, puesto que nuestra microbiota no es idéntica a la de los ratones. Giorgio Trincheri, uno de los autores del trabajo estadounidense, asegura que habrá que realizar ensayos en humanos antes de nada; Laurence Zitvogel, otro de los autores del estudio galo es en cambio más tajante: "a partir de ahora seremos más cuidadosos a la hora de prescribir antibióticos a nuestros pacientes con cáncer", concluye.
 

martes, 26 de noviembre de 2013

Los probióticos combatirían la depresión

Diferentes estudios con probióticos sugieren que estos tendrían una serie de beneficios potenciales para la flora intestinal, facilitar la digestión y evitar el estreñimiento, pero su bondades podrían ser mayores, de acuerdo con el Colegio Universitario de Cork, Irlanda los alimentos probióticos también podrían ayudar a combatir la depresión.
 
Según los resultados publicados en la revista Biological Psychiatry, las bacterias probióticas tienen un efecto directo sobre el comportamiento químico del cerebro, toda vez que juegan un papel clave en la producción, la absorción y el transporte de sustancias neuroquímicas como la serotonina y la dopamina que son fundamentales para la salud del cerebro.
 
Para el estudio los investigadores examinaron el efecto de alimentar ratas que presentaban comportamientos depresivos debido a la separación con una bacteria llamada B. infantis. Según los científicos, el probiótico tiene actividad antidepresiva o ansiolítica y normalizó tanto su comportamiento como su sistema inmunitario debido a su poder para inhibir las moléculas inflamatorias llamadas citoquinas (proteínas responsables de la comunicación intercelular).
 
Según los expertos, el estado de ánimo de una persona estaría influido por las bacterias intestinales y sería el nervio vago el dispositivo de unión entre la microbiota intestinal y el cerebro.
 
“Este estudio identifica los potenciales objetivos en el cerebro y una ruta a través de la que ciertos microorganismos del intestino pueden alterar la química y el comportamiento del cerebro de ratones. Estos resultados ponen de manifiesto el papel importante que juega la microbiota del intestino en la comunicación bidireccional entre el intestino y el cerebro, abriendo así una oportunidad interesante para desarrollar estrategias basadas únicamente en el empleo de microorganismos para tratar los trastornos psiquiátricos relacionados con la depresión”, dijo John F. Cryan, uno de los autores de la investigación.
 

lunes, 25 de noviembre de 2013

El resveratrol podría combatir los efectos de la metanfetamina

La dopamina es un neurotransmisor relacionado con las adicciones, pues drogas como la cocaína, el opio, la heroína, las metanfetaminas, el tabaco y el alcohol liberan esta hormona.
 
La metanfetamina tiene la habilidad de liberar rápidamente dopamina en las regiones de gratificación del cerebro, lo que produce la euforia intensa o “rush”, que muchos consumidores sienten después de inhalar, fumar o inyectarse la droga.
 
"La dopamina es fundamental para el desarrollo de la adicción a las metanfetaminas” aseguró Miller, profesor asociado en el Departamento de Ciencias de la Psicología e investigador del Bond Life Sciences Center de la Universidad de Missouri, que explicó que es una droga que con el tiempo y el uso constante provoca la reducción de los niveles de dopamina en el cerebro ocasionando síntomas parecidos a los de la enfermedad de Parkinson.
 
"El resveratrol ha demostrado que regula estas neuronas de dopamina y tiene un efecto protector en la enfermedad de Parkinson, por lo tanto, hemos tratado de determinar si también podía afectar los cambios inducidos por la metanfetamina en el cerebro", añadió el especialista.
 
Para determinar si lo expuesto era cierto, se utilizó un modelo animal en el que les fue administrado a ratas resveratrol una vez al día durante siete días en la misma concentración que un ser humano lo recibiría en una dieta saludable.
 
Al finalizar la semana los investigadores midieron la cantidad de dopamina liberada por la metanfetamina y encontraron que el resveratrol había disminuido la capacidad de las metanfetaminas para aumentar los niveles de dopamina en el cerebro. Además, la sustancia también atenúo la hiperactividad inducida por la metanfetamina en los roedores.
 
“Nuestra investigación inicial sugiere que el resveratrol podría incluirse en un régimen de tratamiento para los adictos a la metanfetamina y que tiene el potencial de disminuir el ansia y el deseo por el estimulante. El resveratrol se encuentra en varios alimentos y tiene pocos efectos secundarios. Todos deberíamos consumir resveratrol para la buena salud del cerebro, nuestra investigación sugiere que también puede prevenir los cambios en el cerebro que se producen con el desarrollo de la adicción a las drogas", aseguró Miller.
 
¿Qué es el resveratrol?
El resveratrol es un compuesto natural que se clasifica como polifenol (antioxidantes naturales) y se encuentra contenido en más de 70 especies de plantas entre las que se incluyen algunos frutos secos, la piel de las uvas y el vino tinto.

¿Qué es la metanfetamina?
Es una droga estimulante muy adictiva. Puede fumarse, inyectarse, inhalarse o tomarse por vía oral. Se conoce en español con muchos nombres, tales como anfeta, meta y tiza, o en inglés como speed, meth y chalk. El clorhidrato de metanfetamina, la forma cristalina inhalada al fumar, se conoce en español como hielo, cristal o vidrio (ice, crystal, glass y tina en inglés).
La metanfetamina afecta el cerebro y puede crear sensaciones de placer, aumentar la energía y elevar el humor. Las personas que abusan pueden volverse adictas rápidamente y necesitar dosis más altas con mayor frecuencia. Los efectos adversos que provocan son variados y van desde las arritmias, aumento de la presión arterial hasta problemas psicológicos y neurológicos diversos. Los efectos a largo plazo pueden incluir trastornos mentales severos, pérdida de la memoria y problemas dentales severos.

Fuente:  http://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0304394013007842
http://holadoctor.com/es/adicciones/resveratrol-combatir%C3%ADa-efectos-de-la-metanfetamina

viernes, 22 de noviembre de 2013

El consumo de nueces reduce la tasa de mortalidad total y por causas concretas

Según un estudio publicado en The New England Journal of Medicine, las personas que consumen nueces diariamente tienen una probabilidad un 20 por ciento menor de fallecer por cualquier causa.
 
El consumo de frutos secos, como almendras, nueces de Brasil, anacardos, avellanas, piñones, pistachos y nueces, está inversamente asociado con la mortalidad total en hombres y mujeres, independientemente de otros factores predictivos de muerte. Además, hay relaciones inversas significativas para las muertes por cáncer, enfermedades del corazón y respiratorias.
 
Las personas que consumen nueces diariamente tienen una probabilidad un 20 por ciento menor de fallecer por cualquier causa durante un periodo de 30 años que quienes no lo hacen. Así lo revela el mayor estudio sobre la cuestión realizado hasta la fecha, que se publica hoy en The New England Journal of Medicine.
 
Los autores examinaron la vinculación entre el consumo de frutos secos con la mortalidad total y por causas específicas entre 76.464 mujeres en el 'Estudio de Salud de las Enfermerras' y 42.498 hombres en el 'Estudio de Seguimiento de Profesionales de la Salud'.
 
En cuanto a las causas específicas de muerte, el trabajo desvela una reducción del 29 por ciento en los decesos por enfermedad cardiaca, así como una disminución del 11 por ciento en el riesgo de morir por cáncer.
 
Los responsables del trabajo, encabezados por Charles Fuchs, director del Centro de Cáncer Gastrointestinal Dana-Farber y jefe del Departamento de Oncología Médica  del mismo en Boston, señalan que ya se sabía que un mayor consumo de nueces está asociado a una reducción del riesgo de padecer enfermedades crónicas como la patología cardiovascular y la diabetes tipo 2. Sin embargo, la asociación entre este alimento y la mortalidad todavía no contaba con suficientes avales científicos ni tiempo de análisis.
 
Las nueces contienen importantes nutrientes como grasas saturadas , proteínas de alta calidad, vitaminas (vitamina E, ácido fólico y niacina), minerales (magnesio, calcio y potasio) y fitoquímicos, todos ellos con propiedades cardioprotectoras, anticancerígenas, antiinflamatorias y antioxidantes.
 

jueves, 21 de noviembre de 2013

Unos niveles altos de vitamina B12 pueden indicar riesgo de cáncer

La vitamina B12 (cobalamina CBL) es esencial para mantener unas adecuadas funciones fisiológicas, pero niveles superiores a los normales (un rango de referencia 200-600 pmol/L) pueden indicar que un paciente está en riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer, según un estudio publicado este lunes en "Journal of the National Cancer Institute". Estudios previos ya habían sugerido una asociación entre los niveles altos CBL y determinados cánceres.
 
Para evaluar la asociación entre los niveles altos CBL y el riesgo de cáncer de cualquier tipo, Johan Arendt, del Departamento de Epidemiología Clínica y el Departamento de Bioquímica Clínica del Hospital Universitario de Aarhus, en Dinamarca, y sus colegas utilizaron registros médicos daneses para revisar a 333.667 pacientes sin cáncer y estimar la incidencia de cáncer en esta población entre 1998 a 2010.
 
Los investigadores excluyeron a las personas que tenían un diagnóstico de cáncer antes de la fecha de la medición de plasma y las que estaban recibiendo terapia CBL y encontraron que el riesgo de cáncer, en general, aumenta con los niveles más altos CBL, especialmente durante el primer año después de la medición y para aquellos con niveles superiores a 800 pmol/L.
 
Estos científicos también hallaron que después de cinco años de seguimiento, el riesgo para los cánceres hematológicos y los relacionados con el consumo de alcohol y tabaco se mantuvo alto para aquellos con niveles mayores de 800pmol/L. Los autores de la investigación resumen que los altos niveles plasmáticos de CBL aumentan el riesgo de cáncer diagnosticado posteriormente, sobre todo en el primer año de seguimiento.
 
"Hay que tener en cuenta que los altos niveles plasmáticos de CBL, probablemente, no están relacionados con la ingesta normal de vitamina B12 porque el consumo de alimentos que contienen CBL o suplementos no aumentan sustancialmente los niveles plasmáticos de CBL. Más bien, los altos niveles CBL pueden ser el resultado de algún proceso maligno desconocido", concluyen.

Fuente: http://jnci.oxfordjournals.org/content/early/2013/11/11/jnci.djt315.long

miércoles, 20 de noviembre de 2013

Los bulos sobre propiedades saludables de los alimentos, tanto positivos como negativos, nos hacen desconfiar y pueden acabar con su reputación

¿Qué tienen en común la leche, el café, los refrescos, el azúcar, los aditivos, el huevo o el chocolate? Todos son productos de consumo básico, diarios, necesarios, y, para bien o para mal, al igual que muchos otros dependen cada vez más de lo que el consumidor conoce de ellos, el problema es que en los últimos años han aumentado los bulos sobre la alimentación y sus efectos sobre la salud.
 
Al final, un alimento vale lo que vale su reputación, una opinión favorable o negativa puede aumentar sus ventas o destruir su consumo, pero detrás de lo que se conoce, informa o publicita no siempre hay una información veraz o rigurosa, es aquí donde la alerta se hace necesaria y la educación nutricional es básica.
 
La responsable del Grupo de Biología Funcional de Bacterias Lácticas del CICAL (CSIC), Carmen Peláez, advierte de que es el "rigor" el que debe imperar en la información que se trasmite sobre el efecto que cierta alimentación puede tener sobre la salud. El aumento de información a través de los nuevos 'mas medias' y redes sociales ha incrementado la información, una información cada vez más demanda porque "el consumidor esta ahora muy interesado en la relación entre alimentación y salud".
 
"Quizá hasta no hace muchos años parecía que eran dos cosas diferentes ahora cada vez más el consumidor cree, piensa y sabe que la alimentación influye en su estado de salud", explica, al tiempo que observa que éste es el motivo por el que en los últimos años han aumentado la disponibilidad de estos contenidos.
 
"Hay que tener en cuenta que todo lo que llega al consumidor va a influir muchísimo en los hábitos de consumo", y según se ha observado "cada vez más afecta lo que le llega a través de fuentes no contrastadas"; esto lleva a pensar que un alimento vale más por lo que se dice de él que por lo que supone su consumo para la salud.
 
En los últimos años, ante el consumidor se ha abierto un abanico de posibilidades; bulos, mitos y medias verdades sobre alimentos de consumo se mezclan con estudios rigurosos, basados en la evidencia científica, ampliamente contrastados en lo referente a la seguridad del producto y sus propiedades.
 
"Es normal que muchas veces el consumidor piense que le van a volver loco", afirma esta experta en el desarrollo de estudios científicos, que recuerda que "hay muchos mitos y muchas creencias alrededor de muchos productos, muchos han ido creciendo, pero en algunos mitos han disminuido".
 
Datos de la Asociación de Internautas sobre bulos y fraudes en Internet deja visible que hasta un 97,2% de los internautas los sufren, siendo los que más se repiten los relacionados con la salud y la alimentación; mientras, un reciente estudio sociológico realizado en marzo 2013 por Myworld, confirma que ante una noticia negativa sobre alimentación el 39% de los consumidores se platean dejar de consumir los productos o dejan de consumirlos y hasta un 80% comenta la noticia con el entorno.
 
"Todos, incluidos los que conocemos el sector, nos asustamos un poco cuando se dice taxativamente o categóricamente que un producto produce o cura el cáncer; esto puede influir negativamente sobre un producto hasta dejar de comerlo completamente y todo sin ningún rigor científico, sin ninguna evidencia científica detrás de la información", alerta.
 
Por tanto, "se cambian hábitos si se recibe una noticia negativa", siendo el "efecto multiplicador del boca a boca" el más peligroso; no obstante, "también ocurre cuando la información es positiva".
 
Evidentemente, añade Peláez, "lo que comemos influye de un modo muy importante en la salud, e incluso de manera determinante en algunas enfermedades", sin embargo antes de desechar o sobre alimentarnos pide al consumidor "sentido crítico" ante la información trasmitida.
 
De sobra son conocidas las informaciones contradictorias sobre productos como el huevo, vilipendiado durante años por un erróneo conocimiento en su relación con el colesterol; el chocolate, un placer prohibido para las dietas dependiendo de dónde se lea la información; la carne roja, un alimento necesario por su alto contenido en hierro que últimamente relacionan- siempre hablando desde el abuso- con una mayor incidencia en el riesgo cardiovascular e incluso en el cáncer.
 
Estos solo son algunos productos, la lista es innumerable, "y, aunque todos son peligrosos, los más peligrosos son aquellos que afectan a enfermedades graves". Un ejemplo claro y extendido es aquel que destaca las propiedades del limón para matar las células cancerosas, asemejándolo con la quimioterapia.
 
A mayor escala ocurre con las dietas, que proliferan en blogs, redes sociales y webs "sin una sola referencia científica". El problema, añade, "es que en temas de alimentación con quien se contrasta no es con el médico, normalmente se hace con un amigo, la familia e Internet".
 
En este caso, "lo ideal sería tener un nutricionistas de cabecera, pero ¿quien tiene uno?", se pregunta Peláez. La solución, por tanto, pasa por "aumentar la educación en nutrición" de modo que el consumidor sepa distinguir cuál es una información con rigor y cuál puede obedecer a un interés particular.
 
Otra cuestión es de dónde surgen estas informaciones. En respuesta, afirma que "la mayor parte de los bulos se difunden por Internet y no tienen detrás ni ningún dato que lo sostenga, muchos de gente corriente con ganas de figurar"; otras veces están originados por "conflictos de intereses" entre empresas; mientras que los mitos y creencias obedecen sobre todo a costumbres culturales.
 
Como norma general una noticia sobre las propiedades de un alimento en un medio de comunicación puede llegar por varias vías. La primera, y la más rigurosa, es aquella que viene directamente de un estudio científico, contrastado por varios profesionales e indexado en una publicación científica reconocida internacionalmente; en segundo lugar, sin tanta verificación de expertos pero no con inferior veracidad existen estudios realizados por grupos de investigación presentados en foros y congresos, de los que se terminan haciendo eco los medios.
 
"Que se publique en una revista indexada tiene mucho rigor pero no despreciamos en absoluto, no solo no despreciamos sino que creemos absolutamente indispensable, hacer una divulgación también en foros o en revistas de otras investigaciones", explica.
 
En su opinión, es importante que haya un "compromiso serio en la trasmisión de la información por parte de todos", y que se tenga claro que una información de prestigio depende, no sólo de dónde se publica, sino también de quién la realiza (autor o autores) y cómo se realiza.
 
Precisamente, explica, en esto está trabajando la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria que "esta viendo cuáles son precisamente las herramientas que le van a dar validez o rigor científico". Gracias a este paso "se va a poder decir que un producto alimentario determinado ha tenido los suficientes respaldos científicos para que una empresa lo pueda etiquetar", añade.
 
Esta experta, que defiende el compromiso de la industria por la información veraz, entiende que "hay que comprometerse a hacer una crítica de alguna manera a que la información trasmitida se haga de una manera correcta". En este sentido, "no hay duda en la información que le llega al consumidor directamente desde la industria", puesto que existe suficientes herramientas regulatorias a nivel europeo que así lo establecen.
 
"El consumidor está protegido con una reglamentación que tiene sus más y sus menos y que tiene mucho por desarrollar todavía. (...) Hay una reglamentación que aún tiene fallos, que es laxa que hay que centrar mucho más, pero en fin de alguna manera hay una reglamentación que está protegiendo al consumidor", señala haciendo autocrítica.
 

miércoles, 13 de noviembre de 2013

Vinculan un compuesto de las setas a la enfermedad de Parkinson

Sospechan que el compuesto fúngico esté asociado de alguna manera con la enfermedad neurodegenerativa en humanos.
 
Un grupo de investigadores de las universidades de Rutgers (New Jersey) y de Emory (Atlanta) ha descubierto que un compuesto orgánico, emitido por las setas, produce signos similares a los de la enfermedad de Parkinson en la mosca de la fruta.
 
El hallazgo, que se publica en PNAS, hace sospechar que el compuesto fúngico esté asociado de alguna manera con la enfermedad neurodegenerativa en humanos. La molécula, 1-octen-3-ol, un alcohol presente en setas y champiñones, ataca en el modelo experimental a dos genes implicados en la vía de la dopamina.
 

lunes, 4 de noviembre de 2013

El ácido lipoico, un antioxidante, acelera la inmunidad cerebral tras una lesión

Investigadores del Instituto de Ciencias Biomédicas de la CEU-UCH, la Facultad de Ciencias de la Salud de esta Universidad y la Facultad de Medicina de la Universidad de Barcelona han dado un nuevo paso en sus investigaciones sobre el uso de antioxidantes para favorecer la regeneración de los tejidos neuronales tras una lesión cerebral. Su último estudio, publicado en "Clinical and Developmental Immunology", comprueba que la respuesta inmune del cerebro ante una lesión cerebral se acelera con la administración de ácido lipoico. El ácido lipoico es un potente antioxidante empleado para el tratamiento de enfermedades degenerativas, como la esclerosis múltiple o la neuropatía diabética. El nuevo trabajo indica que este ácido favorece la generación de células de microglía.
 
Según José Miguel Soria, profesor de la CEU-UCH e investigador principal del equipo, "estas células de microglía son actores esenciales de la respuesta inmune, por lo que es clave estudiar su actividad en situaciones en las que se produce un daño cerebral, especialmente en combinación con la administración del ácido lipoico para su tratamiento". Los investigadores han observado que este ácido favorece la restauración de los tejidos a los 15 días de la lesión cerebral, aunque este efecto decrece dos meses después de la aplicación del tratamiento.
 
También han confirmado una aparición temprana de células fagocitarias en torno al tejido dañado gracias al efecto del ácido lipoico, lo que confirma la rápida activación de la respuesta inmune en el cerebro y favorece la restauración de los tejidos.
 
Además, el ácido lipoico evita la cicatrización de la glía a largo plazo y promueve la formación de la barrera hematoencefálica entre los vasos sanguíneos y el sistema nervioso central, que impide que muchas sustancias tóxicas la atraviesen, al tiempo que facilita el paso de nutrientes y oxígeno al cerebro, garantizando su correcto funcionamiento y, por tanto, su regeneración en caso de lesión.
Según Soria, "estos hallazgos nos permiten comprender mejor la respuesta inmune del cerebro ante una lesión, un paso crucial para poder desarrollar estrategias más efectivas de tratamiento, tanto para el daño cerebral como para importantes enfermedades neurodegenerativas".

Fuente: http://www.hindawi.com/journals/cdi/aip/521939/
 http://neurologia.diariomedico.com/2013/10/29/area-cientifica/especialidades/neurologia/antioxidantes-aceleran-inmunidad-cerebral-lesión